14 abr 2013

Aquelarre.

Un poco.

Torturas y placeres, que son éxtasis de ventana,
de lo mucho que corremos en nuestro suplicio,
muriendo ante lo poco que queremos volar sobre nuestro juicio.
Anhelamos aquél vicio,
de y para los muertos, son del claro bajo la cana.

Aún siendo León, se cuida del frío,
se cuida la melena...
Aún siendo Ratón, se cuida del quicio,
se cuida la Hiena...
Y por Ratón un Elefante,
para un visto con Elefante bajo Ratón

Un poco.
Y saluda el coraje,
pero el coraje tiene miedo...
Bastante.
Y saluda el brebaje,
pero el brebaje viene quieto...

De ahí en cuando, se hace licuado el corazón
Se hace piadoso el brebaje...

No me tengan miedo ni compasión
cuando asaltamos ruidosos la razón
cuando ya partamos en osos que son, que Son.

Un poco.
de agua,
de ahí en cuando, convierte perdido el culto,
Se hace el coraje, un saludo sin canción.
Del verbo "montar" cuando papeles tenemos,
y convierte de poco de hojas quienes pertenecemos.

Que del bastante soñamos siempre,
quién para quién y perderlo
de sueño voy y voy soñando en esconderlo.
Del verbo "mucho" cuando a quién verlo.

Un poco.

Decían quietos disparando utopías,
para velar de tierra y los sofoco,
procurando al velo un poco,
almohada justa al abrir las mentiras

Suficiente.

Me contaron, que suficiente,
que si le dispara inconsciente,
canto de requisitos los que mienten,
no concluyen aunque pequemos.
Pero no fue suficiente.

Y ahí se congelan los volcanes,
que con velas advierten,
que de velas se mantienen,
que de congelados se divierten.

Suficiente, pero no lo dijo.

Un poco, mucho.
Suficiente.







No hay comentarios:

Publicar un comentario