13 may 2014

La Percepción de la Existencia, Segunda Parte (La Moral de los Paganos)

Mi Libro de Oraciones. 
                                                                    
1.      Religión y creencias
Mis padres fueron católicos, yo fui católico. Ser ingenuo y obediente estaba de moda en toda mi primaria y primer año de mi secundaria, que yacía en una institución manipulada por la autoridad del opus dei. Mis compañeros me molestaban, yo rezaba; mis maestros intentaban bajar mi calificación, yo rezaba; me desquitaba con mi hermano menor y me regañaban mis padres por mi abuso desplazado, yo rezaba. Todo se lo dedicaba a Dios y mi colegio nos imponía la creencia de que si rezabas todo salía bien.
Para segundo de secundaria, mi mente dejaba de dejarse. Me seguían molestando, la sociedad seguía siendo la misma porquería, la hipocresía aún reinaba la moral colectiva, las costumbres eran las mismas; pero yo ya comenzaba a subir un peldaño hacia la iluminación. Desde mi primera visita al psiquiatra por ataques de desplazamiento –que ocurrían a menudo y las víctimas solían ser personas o muebles- supe que sufría de trastornos por traumas irreversibles; pero que, en una institución legionaria ya en el 2009, podía manipularlos a mi favor… y el recuerdo del Dios omnipotente se balanceaba.
Cuando entré a la preparatoria, sin cambios en el entorno social, zarpé de filosofía en filosofía, posicionado en el escepticismo. Al comenzar el cuarto semestre yo poblaba y colonizaba metaversos, alejándome por completo de la sociedad; para el verano del 2012, tomando con fuerza El Ocaso de los Ídolos (Friedrich Nietzsche), me dejé iluminar por la transición de un Dios que no hace nada, a un Dios que ha muerto. Terminé en un auge pseudointelectual que me azotó contra un Dios vivo, y resucitado por mí, para poder vencerlo a mano limpia… y lo vencí.

2.      “Yo soy Dios, témeme.”

Le insistía con gritos a mi madre de que yo ya no creía en nada, solo en mí, pues en mí siempre estuvo la respuesta. Se lo tuve que demostrar. Obtuve las mejores calificaciones en algunas materias en el último año de mi preparatoria, aprobando las demás, dando clases en las tardes a algunos compañeros, distanciándome de cualquier amistad. Yo soy Dios porque soy creador de metaversos, porque Dios es humano y estúpido y ansioso de aprender. Mi madre se convenció, mi padre siempre pensó lo mismo que yo y seguí sus pasos inconscientemente y mi hermano me siguió a mí de la misma manera.
Lo que nunca pudo ser tolerado por mi familia fue mi existencialismo hedonista. Mi vida se rodeaba de excesos y aun así todo me salía bien. Una vez convencí a una niña en la pubertad de que yo efectivamente era Dios; sólo usando argumentos de deducción empírica simple, luego lo mismo para beber o comer gratis, para que dijeran esto y lo otro, para que hicieran eso y aquello… sí era Dios; inventado, ficticio y mentiroso como el original.
Por agresivo en premisas me pedían discusiones amenas y por persuasivo en mi lógica me pedían consejo; soy feliz desde entonces, engañando y manipulando; sirviendo y protegiendo… un caudillo despreciado por los cerrados de mente, por los dogmáticos, por los burgueses. Un “Caudillo de Sueños”1, la “Ceniza de Gardenias”2.
(1)   Pseudónimo del autor referente a la firma en sus escritos de temas agresivos, tabúes, revolucionarios, sociales y filosóficos.
(2)   Pseudónimo del autor referente a la firma en sus escritos de temas sentimentales y en sus poemas.


3.      Yo, persona/Yo, personaje.

Después de mis pseudónimos y mis alter ego, traté de convencer a la gente de que cuando trato de convencerlos me contradigo con múltiples verdades; y en eso me convertí, en una contradicción viviente a mucha honra. Mi psicopatología se había expandido y estructurado en un “árbol de raíces eternas”, dirigido por dos esferas esenciales: Yo-Persona y Yo-Personaje. Persona era Dios mismo como yo mismo, mi subconsciente todopoderoso e invencible; Personaje era el humano promedio mismo como yo mismo, mi personalidad y mi comportamiento.
De ahí, la “Teoría del Duelo Perpetuo”1 (Pedroza Metilfenidato 123) y sus efectos en mi soberbia. Una estructura del más perfecto y ordenado caos, con todos sus trastornos expresándose como la entropía de mi psicopatología y toda la Ley de Coulomb expresándose como mi comportamiento y mis demonios. Alucino desde entonces, me alucino y a todos mis familiares y amigos les importa, menos a mí. Yo-Persona comenzó a presentarse en una imagen-espejo.
Me gustaba confesar cosas, para que la gente me conociera y decidiera si seguir cerca de mí o alejarse de que sea demasiado tarde cuando dejen de notar mi presencia porque, sin confesar el por qué, es más peligroso. Me di cuenta que ya era víctima de mi propio dogma y eso me causa mucho placer y control desde entonces… manipulo lo que siento y viceversa.
(1)   Referente a la teoría inventada por el autor, descrita en Voz de Madrugada.

4.      Hacer y ser

Nunca creí en las coincidencias. Los hechos científicos son llamados así por algo y no se refieren siempre a la entropía del cosmos. Mucho tiempo estuve interesado en la física y en la química y creo que invirtiendo un poco más de entusiasmo (y dinero) en investigaciones, podríamos convertir las teorías sobre el origen del universo en leyes; demostrando ipso facto que cualquier dios que ha existido o existe no ha sido más que un justificado invento de la misma humanidad. Los contras serían la posible aniquilación de la especie debido a que ya no importará obrar bien, ni la moral, pues no hay nada más allá de la muerte.
Fui inundado de pensamientos orientales alguna vez, podría decirse que el budismo es la religión que más tolero y la única que acepto en el sentido trascendental de la predestinación así como en su ética de las acciones; pero las acciones no fueron siempre tan menospreciadas, que es lo mejor que se puede hacer ante éstas. El menosprecio a los actos produce una inquietante estabilidad mental; en la Teoría del Duelo Perpetuo se perciben como simples estrategias de socialización maquiavélica, al grado de comprobar que no siempre la personalidad influye en lo que hacemos mediante las razones individuales de la mentira como mecanismo propio aislado. La percepción cognitiva elemental siempre será delimitada a la ciencia y al arte; las coincidencias y, ergo, la religión, sólo son parte del “relleno” en el devenir, dentro del contexto del sentido de la vida humana.
Si bien he escrito muchos versos y mucha prosa, los textos que más me complacen releer son cuentos dedicados a la peste de la sociedad moralizada; sueños eróticos lúcidos, amor lésbico, psicotrópicos y estupefacientes, imperialismo materializado, decadencia intelectual, etc. Empero, todo aquello que ha sido, es y será escrito por mí, sólo es un menosprecio a las acciones; una burla caracterizada en letras impersonales, pero propias:
La teoría del Duelo Perpetuo trata de explicarse a sí misma la posición del Orgullo dentro de una persona, resumiendo que el Orgullo y el Orgulloso son secciones que se complementan pero que no conforman un total psicopatológico.

La teoría del Duelo Perpetuo se rodea por dos leyes y una tercera fracción inmaterial. El orgullo es inofensivo entre dos condicionales muy diferentes, irónicas, no es una teoría como tal uniforme; se mezclan la ley de Coulomb y la Entropía. Los opuestos, en la teoría del Duelo, no solo se atraen, hay algo “Darwinesco”, el orgullo atrae al opuesto para esclavizarlo, pero no martirizarlo, Maquiavélico y tierno. El humilde admira al orgulloso, siempre y cuando tenga éste algo que ofrecerle, pero no necesariamente, el humilde, necesita esta oferta intelectual, sin embargo no sufre conciencia y no logra digerir el concepto motivacional de premio por independencia o fácil aprendizaje autodidáctico aun siendo capaz de posibilitarlo. El orgulloso no recibe paga porque, tautológicamente, no la necesita, entonces cubrimos dos necesidades que paradójicamente se complementan en un ámbito social; ya no existe un “te proporciono porque tú lo careces”, es un complicado y capitalista “te proporciono lo que no tengo, porque no lo necesitas”. El humilde es indefenso cuando el rival se defiende y es transparentemente indestructible cuando es atacado; así, el orgulloso le proporciona un escudo contra el escudo al humilde y éste le proporciona una infalible falacia ex populo al orgulloso o simplemente la bienvenida teoría consensual… tremenda espada villana de una manera justa e injustamente heroica. Esto como variable atenuante de la primera condicional; la ambición maligna, fundamentada por el fanatismo del círculo social voluntariamente dependiente, provoca el imperialismo idealista del orgulloso.

La segunda condicional, la Entropía, ejerce una constante indefinida. El rival posa sobre la paradoja temperamental del orgulloso y el caos se expresa en implosión; un contrario es, fundamentando la ironía representada en diagrama de Venn al entrelazar ambas condicionales, el similar orgulloso; descarto la refutación hacia ésta segunda condicional, ya que el rival puede o puede otra cosa y el protagónico reacciona de la misma forma o de otra ante la capacidad o la capacidad de otra cosa del rival. Recordemos que ambos cuentan con ex populo, y que si estos “refuerzos” estallan en conflicto, ambos orgullosos pueden o no pueden o pueden de otra manera conciliarse… o no.
Sucede en ciertos individuos, incluyendo a uno, que estas cuatro partes de la teoría del Duelo Perpetuo ES la sección complementada dentro de lo que ESTÁ en el total psicopatológico; en ciertos individuos, la teoría del Duelo Perpetuo es ambigua. Se refiere a la interna y a la externa, la externa ya está escrita… la interna es relativa a lo explicado y relativamente inexplicable. Tratémoslo como la teoría del Duelo Interior Perpetuo, cuando la Doble Personalidad está fuera de la cuestión como espectadora pero acercándose a un parecido Deísta. (Pedroza Metilfenidato 135)
Probablemente solo traducía música, como si fueran libros en un idioma inexistente… en palabras-desahogo.
Como en este caso, siempre se me ha dificultado escribir sobre lo que escribo, por eso me dejo llevar en muchas ocasiones y en muchas ocasiones llego a divagar. Todo concluye en la dualidad de mi personalidad doble –que no es “doble personalidad”- y es por eso que hacia específicos casos de personalidades ajenas utilizo el ‘disfraz contradictorio’; así, evito divagar y perderme también cuando hablo, tomando posturas teatrales ante situaciones en las que el receptor no necesita escuchar argumentos en donde el ruido del canal son precisamente las deducciones del emisor, un servidor.
Después del viaje a Cuba, padecí una epifanía de larga duración. Sufrí un tiempo de cansancio literario debido a la cantidad de poemas, relatos y reflexiones escritos en La Habana; mi comportamiento se tornó a un semblante de color callado y mis discusiones destilaron sólo suspiros y aceptaciones. Desde ese momento al presente Yo-Persona es prudente y me aconseja, porque me convertí en Personaje.

5.      El Existencialismo y los Anti-Metas.

Corrompí las reglas de la cordura, las distorsioné. Nunca tendré hijos (por lo menos intentaré no tenerlos) por la culpa de culparlos; no me sueño dedicando el tiempo a mantener uno o varios seres humanos que tendrán que someterse a mi pesimismo y al porvenir. No quiero seguir contaminando al planeta aún después de haber fallecido mediante mi descendencia; el consumismo ya en exceso espera una inminente sobrepoblación y una difusión total de medios masivos de comunicación. ¿Para qué incluso pensar en una vida hermosa si lo hermoso es vivir en uno y para uno mismo?
Nunca juzgaré por apariencia debido a lo inútil que resulta arruinar el placer de juzgar por argumentos justo después de presentarse con la situación; no me quiero dedicar a arriesgar el discernir sobre futuras posibilidades de ingresos. La cultura no cambia, las costumbres sí, por necesidad; esclavizada por la globalización, la cultura hoy es más importante reconocerla ante una sociedad que ante una sola persona.

6.      Fatalidad e Inmortalización

Moriré joven, siempre lo he pensado y creído. El hedonismo ha conquistado mis expectativas de la vida (no “de vida”), no quiero ser parte de esa ridícula personalidad masiva que cree que cuidarse es lo mejor aunque sea excesivamente cierto, por eso mis vicios terminarán conmigo algún día. Para mí el placer, el arte y la ciencia cubren en su totalidad las necesidades de mi método estratégico para mantenerme siempre en estado positivo y feliz. Ahora bien, no he mencionado que Persona suele ser muy oscuro; a veces se refleja en Personaje como parte de su comportamiento habitual, pero la mayoría de las veces sólo cuando está solo. Parte de las actividades que realiza mi Dualidad es escribir sin mi permiso, lo explico: parte del diagnóstico psiquiátrico, en el momento de decidir mis creencias, fue trastorno del sueño. Me recetaron unas pastillas llamadas Stilnox®, que eran, básicamente, un golpe de zolpidem en mi sistema nervioso y me llevaba a hacer cosas fuera de mi propio criterio, como escribir sobre cierto tipo de temas. En las mañanas, al leer los textos, muchas veces son dedicados a mí o dedicados a partir de mis actos. Estos textos llevan un lenguaje oscuro, agresivo, gótico, romanticistas, trágicos y nihilstas; siempre soy el protagonista y siempre es la humanidad un antagonista:
Soy responsable del embarazo tortuoso,
soy sonada neurona sonda de silencios,
que Goya sin tiempo ha puesto incolora,
porque incolora para ustedes se resume,
en el conjunto de colores y la suma de sus ausencias.

Soy la vida de lo que la arrebata,

la circunferencia lluviosa del desierto,
el nombre del apocalíptico sueño,
el poema fatal que le reza al escéptico,
la prosa que en estrofas se manifiesta,
como hoy descanso sin redacción...
como nunca el hoy ha tenido reglas,
para mí.

Soy el navegante de aquella arena azul,

sobre la parca marítima, manifiesto;
sobre la soledad boscosa, manifiesto;
sobre la bestia bajo la cama, manifiesto;
sobre la falta de aire en la misma carencia, manifiesto;
sobre aquél desamor del romántico, manifiesto;
sobre la cripta de los caídos para sus madres, manifiesto;
sobre la madre cuya cría dispara en capitalismo, manifiesto;
sobre la bebida que sufre la progenitora del puberto, manifiesto;
sobre la roca cálida del reptil vulnerable, manifiesto;
sobre la misma esencia en la que ora el ser humano, carente de luz, manifiesto;

Pronuncian mi nombre con pocos nombres aditivos,

que dibujan vacías esquinas sin opciones de camino,
me nombran "celos" en los noviazgos fieles,
combustible de aquella desesperación errónea,
bestia hedionda bajo las rocas, allí manifiesto,
cual dicha parábola de aquél que se nombra en orgullo. (Pedroza Mi Nombre. 122)

Si Dios me conociera, se reduciría el lazo al poema anterior. Es difícil de explicar, mi subconsciente toma control de mi cuerpo al momento de comenzar las ondas SWS, he escrito cuentos sobre el “metaverso espectral”1 y su desempeño como influencia en mi vida cotidiana y en mi futuro; moriré joven, siempre lo he pensado y creído.


7.      “Me dejo llevar luchando…”

Algún día mis vicios terminarán conmigo. Lo repito porque se puede malinterpretar y lo repetiría mil veces más por lo mismo. Yo llevaré una vida guiada por el placer y el conocimiento, pues las coincidencias no existen, mucho menos la suerte. Quiero ser millonario o quiero ser pobre; quiero ser atractivo o quiero ser feo; quiero ser amable o quiero ser un desgraciado. Quiero y puedo ser músico, o actor, o director, o productor, o periodista, o poeta desalmado, o escritor desahuciado, o físico teórico, o diputado del PRI, o senador del PAN, o presidente perredista, o dictador, tal vez emperador del mundo, o taxista, o barrendero, no me importa mientras pueda. Las posibilidades son infinitas y las puedo dominar a mi favor; si inventan una máquina que nos permitirá ver el futuro… haría todo lo posible por destruirla.

(3)   Referente al tema central/personaje/espacio del cuento del autor Subterráneo.






Fuentes citadas

-Pedroza, Adolfo. Voz de Madrugada: Metilfenidato. San Luis Potosí: blogger, 2013
-Pedroza, Adolfo. Voz de Madrugada: Mi Nombre. San Luis Potosí: blogger, 2013
Fuentes Consultadas
-Pedroza, Adolfo. Voz de Madrugada: Subterráneo. San Luis Potosí: blogger, 2013
-Pedroza, Adolfo. Voz de Madrugada: Robles y Manzanas. San Luis Potosí: blogger, 2013
-Pedroza, Adolfo. Voz de Madrugada: TRECE. San Luis Potosí: blogger, 2013



9 may 2014

Electricidad Reptileana.

He decidido/descubierto que este personaje […] este YO que alucino (Yo-Persona) es Caudillo de Sueños… y que pertenezco a un hospital psiquiátrico y NO a una institución en donde (y Menos) estudio una carrera.
¬Léase “Énfasis” – C.d.S, 154¬

El doble de Dios es todo aquél que siente atracción inmediata por la Luna…
Dios es todo aquél que sueñe a la Luna tal y como la imagina y sueña despierto.

La paciencia es una servilleta de tela mal doblada para los unidimensionales,
La paciencia es Dios para todo aquél que tenga como ambición Ser servilleta…
… y el término “Dios” es para todo aquél -unidimensional- que quiera serlo.

“La filosofía que alegan los patricios, y los patricios mismos, son una fábrica de juguetes” – (C.d.S, 154)

La Luz que es Luna para resumir aquél suplicio de estética en hueso irresistible y pecado arcaico, |cuando/y carcome| sublime […] estando en estímulo secreto; para despertar con angustia de ondas picantes y el objetivo, concluyendo como autoayuda sintética…

… lo comparto en impulso "explorativo" (y NO exploratorio) -"sobre-en-y-bajo-exploramiento"- bajo mis neurosis color concha nácar, bajo luz ultravioleta >entre sopas, acaramelados, controles luminosos, páginas de libros amarillentas/dulces, aroma cáncer, estantes hechos de diamantes falsos, pantalla sobre tela, alebrije en tonos negros, constelaciones a-menos-de-una-generación/pericronológicas y diminutas, y contradicciones con/en/del que/de aquél salón en donde concurría un taller de redacción<, concurriendo propias catadiásporas, de diáfana destilación en los estruendos... y estruendo sabor tecla rezando a mis juglares huérfanos.

Es fácil buscar un final cuando sólo lo estás esperando; colocar lágrima por lágrima sobre los dientes para esconderlos y desaparecer dentro de ti, observando cómo el mundo perece mientras florece. Creando y destruyendo personas mientras eres eterno e inamovible.
Es fácil abandonar la fe cuando descubres que nunca existió un espíritu tuyo, y serlo todo al mismo tiempo porque ya no hay nada que te limite; te aburres jugando solo y, cuando quieres volver, ya te dejaron en una iluminación oscura pues sólo ellos seguirán sosteniendo su fe.

Es fácil crecer, solo esperas, lo difícil es dejar de hacerlo sin estancarse en el pasado; hundirse queriendo seguir siendo pero lo |ajeno y externo| te esperan en una metamorfosis que nunca pediste.

Es fácil aprender, solo abres los sentidos, lo difícil es dejar de hacerlo sin detener tu crecimiento; aplaudirse cada vez que alguien hace algo por ti y no arreglar cada neurona tuya por ser –cada una de ellas- tan puras y sin sentido… La inocencia de la voluntad.

Es fácil ser poeta y dejar de serlo, lo difícil es serlo -o dejar de serlo- sin Repetirse a uno mismo.
Es fácil dejar de vivir, lo difícil es seguir existiendo… y viceversa.

Porque es estúpido llevar una carga cuando al morir lo sueltas todo, y es simplemente Intolerable soltarlo Todo en Vida y esperar la muerte.

Pero esperar la muerte es simplemente imposible,
Porque es Fácil observar…

… lo difícil es dejar de ser visto.

He dicho por ahí que… porque el ser humano sabe más, vale menos; el animal sabe menos, porque vale más. (Hablando de el concepto del término “vidas”)

"Me encantaría no recordar tus labios,
pero fue una luna, y la sal de mis manos;
no quiero volver a verte, pero verte siempre...
(...) Apuñalar al viento, respirar una nube. (...)
Me encantaría no recordar tus ojos,
pero fue una caricia, una calma, y cantar de los demonios;
no quiero volver a verte, pero verte siempre...
Quiero ATACAR A UN SER DIVINO, y sentir celos de la noche..."
-C.d.S