He decidido moverme;
es más, me he dedicado a moverme, y estoy seguro de que mi vocación será el
movimiento. La dinámica será mi puerto; el estatismo mi continente, pues no me
gusta estar mucho tiempo en Tierra ya que al adentrarse, en la jungla que no es
jungla uno se encuentra con personas… con gente. El movimiento será mi forma de
existir, pues he percibido la existencia, y he de moverme para procurar mi
propio progreso… ¿Qué carajos me importa el progreso de los demás?
Curiosa
controversia, pues me importa un carajo el progreso de los demás como
individuos, mas no como conjunto. He decidido pues (hacer pausa) dedicarme a la dinámica, y
es así como me proclamo: Oficialmente; una separación de la masa, ya que he decidido
controlarla, manipularla, engañarla… no ser
masa.
Después de un poco de cerveza y un poco de McQuail, me he dado cuenta que dentro de su Institución de los Medios de Comunicación –Características de los medios de comunicación-, existen varios parámetros que no se han tomado en cuenta dentro de (énfasis) la perspectiva masa, como la globalización fuera de sus términos estrictos; por ejemplo, él dice que “la participación en la institución como parte del público es en esencia voluntaria, sin compulsión ni obligación social… [Tomando en cuenta que, en contradicción]… la institución está ligada a la industria y a su mercado a través de su dependencia del trabajo, la tecnología y la necesaria financiación.” (McQuail, 40). Estableciendo esto, uno piensa sencillamente que no hay nada más que pensar, pero uno como promedio no cuenta con la epifanía momentánea de que este argumento es totalmente contradictorio. ¿Será necesaria una explicación aparentemente subjetiva? Pues simplemente, porque la sociedad ES la obligación DE la institución ya que, de una u otra forma y queramos o no lo queramos, la institución es víctima de sí misma y que la institución fue parte o forma en tercer plano de, o a (regresar a una pausa objetiva) la masa. ¿Qué hace el publicista de marca sin comprar dicho producto ya sea de la marca a la que representa o de la competencia? Bastante evidente.
Después de un poco de cerveza y un poco de McQuail, me he dado cuenta que dentro de su Institución de los Medios de Comunicación –Características de los medios de comunicación-, existen varios parámetros que no se han tomado en cuenta dentro de (énfasis) la perspectiva masa, como la globalización fuera de sus términos estrictos; por ejemplo, él dice que “la participación en la institución como parte del público es en esencia voluntaria, sin compulsión ni obligación social… [Tomando en cuenta que, en contradicción]… la institución está ligada a la industria y a su mercado a través de su dependencia del trabajo, la tecnología y la necesaria financiación.” (McQuail, 40). Estableciendo esto, uno piensa sencillamente que no hay nada más que pensar, pero uno como promedio no cuenta con la epifanía momentánea de que este argumento es totalmente contradictorio. ¿Será necesaria una explicación aparentemente subjetiva? Pues simplemente, porque la sociedad ES la obligación DE la institución ya que, de una u otra forma y queramos o no lo queramos, la institución es víctima de sí misma y que la institución fue parte o forma en tercer plano de, o a (regresar a una pausa objetiva) la masa. ¿Qué hace el publicista de marca sin comprar dicho producto ya sea de la marca a la que representa o de la competencia? Bastante evidente.
En fin, ya
editaré el texto cuando vuelva a ser parte de la masa, cuando la controle; mientras
tanto creo que no hay problema con ustedes, pocos y escasos lectores, que me
acompañan. Puede ser que me he dejado llevar por las ideas de Comte, pero al
mismo tiempo de Horkheimer, y de Adorno, y de Marcuse. He decidido moldear la
Conciencia Feliz… la idea falsa que parte de las falsas necesidades, digo,
¿para qué esforzarte por buscar ontológicamente lo que necesitas, cuando el
sistema te lo proporciona todo por televisión y propaganda ideológica?
Que la
industria de la cultura se encargue de lo que consumes… pero, digo, vivimos en
un país capitalista; entonces, ¿para qué nos preocupamos en un presente en el
que, lo que consumimos; en donde el emisor es la publicidad, el mensaje el
dinero y el receptor el hombre masa? Déjalo así, querido lector, que todo lo
consumes por el simple hecho de estar pegado a una pantalla en estos momentos. Lo
que de verdad importa es el consumo de pensamiento.
El Consumo
de Pensamiento se asemeja a la Teoría del Duelo Perpetuo (Pedroza, Metilfenidato) y tiene sus mismos
objetivos; formar parte de una comunidad antigua y de la cual el planeta, como
sociedad masa, está totalmente desinteresado... supuestamente.
La verdad
es inexistente, lo sabemos, tú lector y yo –yo-personaje--; pero existe para la
humanidad un término llamado cultura
que se repite tanto como el término economía
y/o contexto; y debemos asumir y
aceptar el término, como comportamiento masa,
que complica la existencia como incentivo perceptivo hacia nuestro grupo
creativo de futuros monarcas globales-masoquistas. Pero, ¿por qué la complica?
Era muy temprano por la mañana, las calles estaban limpias y vacías, yo iba a la estación. Al verificar la hora de mi reloj con la del reloj de una torre, vi que era mucho más tarde de lo que yo creía, tenía que darme mucha prisa; el sobresalto que produjo este descubrimiento me hizo perder la tranquilidad, no me orientaba todavía muy bien en aquella ciudad. Felizmente había un policía en las cercanías; fui hacia él y le pregunté, sin aliento, cuál era el camino. Sonrió y dijo:
-¿Por mí quieres conocer el camino?
-Sí, ya que no puedo hallarlo por mí mismo.
-Renuncia… RENUNCIA- dijo, y se volvió con gran ímpetu, como las gentes que quieren quedarse a solas con su risa. (Kafka, “¡Renuncia!”)
¿Será que
soy sólo un policía y que tú, como lector, has perdido el camino? Pues he aquí
unos cuantos párrafos, estrofas, renglones, garabatos, gatos, gatos grises,
gatos negros…
Como nosotros, que queremos quedarnos a solas con nuestra risa…
Como nosotros, que queremos quedarnos a solas con nuestra risa…
Dice
Anderson Imbert que el ensayo es una
composición en prosa, discursiva pero artística por su riqueza de anécdotas y
descripciones, lo bastante breve como para que podamos leerla de una sola
sentada… pero basta de citas de formato inventado… He hecho una expedición,
una aventura.
“Dicen por ahí, aquellos que dicen ser seguidores de sabios, que somos penínsulas y que el
fanatismo se arregla así, con humor y sin ser islas… Yo digo que todos debemos
dejar de ser ninguna de esas cosas |islas, penínsulas, continentes| y
comenzar a vivir en islas de nuestro entorno, pues perfectamente se vive en una
isla… mientras seamos capaces de QUERER aprender a nadar.” – Mío, todo mío,
Adolfo Pedroza, Caudillo de Sueños, Ceniza de Gardenia, que aquí estoy y aquí
sigo… escuchando Caifanes, fumando y bebiendo.
He decidido
MOVERME y continuar con la dinámica que Frankfurt me ha enseñado…
Hoy se ha
celebrado una fiesta cualquiera dentro de la universidad en la que ahora curso mi
carrera. Al terminar el sol su camino hacia el horizonte y mi cuerpo al
terminar su camino hacia la morada en la que ahora sigo el curso de mi estancia actual. Durante y sólo durante, decidí entrevistar a un sacerdote (énfasis, sin coma parentética, ni comillas, ni recursos que me ofrece la página siendo escritor como el *ser parte de ésta*, paréntesis, énfasis de lo anterior y final del -éste- dentro del mismo y sin mimismo).
Frente a mi estancia hay una iglesia, hermosamente edificada, (ironía curiosa) donde (o dónde, y muchos OTROS paréntesis más... y estilo en aliteración extraña) se celebran misas y eventos de dicha (sin haber dicho) índole; un lugar
en donde la Industria de la Cultura se ha dedicado a “vender”4 creencias e
imponer comportamientos como si fueran inventarios o listas de productos al día
de compras. Fui, un-tanto-poco-en-diminuto estado de ebriedad, decidido,
confirmado… (pausa y bien marcada pausa y nótese) porque nadie me ha confirmado más y me ha animado más, pues, que mi propia
persona; y ésta ha de extasiarse, fascinarse, encantarse, alucinarse, embelesarse, ensimisarse, pasmarse, maravillarse, arrobarse (Wordreference, sinónimos) en preguntar indecencias… (dentro, también, de las preguntas que tú, lector, te haces en este momento a partir del cierre de este, otro, paréntesis)
Al bajarme
del camión tuve que caminar con una inclinación, fuera de mi alcance lineal y espantosa ésta, evidentemente; pero evidentemente placentero y pacífico, entre pastos
verdes (soñar la pausa, como verso frustrado en el imaginario individual e imaginario como frustración de lo que uno quiere convertir en lo-imposible)... y árboles pintados. Pintados (punto imaginante) como pinta uno la cerveza antes de pedirla, cuando se imagina, uno, cuando pinta y pinta, uno pinta y pinta colorá.
Parecía que aquellos, de los autos finos, disfrutaban también de Reforma; como si el aquél negro del cielo fueran cristales, en los edificios altos, altos, (despertar, y dejarse dormir, para dejarse soñar con la imagen anteriormente expuesta... una pausa, la pausa... y muchos paréntesis)... y la fruta del silencio escondido fuera el murmullo de la civilización expuesta ante la ambivalencia de la naturaleza; una noche como todas en una ciudad como muchas en un territorio como pocos en un país como ninguno... en el planeta. Son esos momentos en los que solitarios ambulantes de piernas diarias se dejan pisar por las estrellas, sin remordimientos a lo que alguna vez fue el sol escondiendo la luz durante la novia oscura haciendo el baile del reconocimiento propio.
Parecía que aquellos, de los autos finos, disfrutaban también de Reforma; como si el aquél negro del cielo fueran cristales, en los edificios altos, altos, (despertar, y dejarse dormir, para dejarse soñar con la imagen anteriormente expuesta... una pausa, la pausa... y muchos paréntesis)... y la fruta del silencio escondido fuera el murmullo de la civilización expuesta ante la ambivalencia de la naturaleza; una noche como todas en una ciudad como muchas en un territorio como pocos en un país como ninguno... en el planeta. Son esos momentos en los que solitarios ambulantes de piernas diarias se dejan pisar por las estrellas, sin remordimientos a lo que alguna vez fue el sol escondiendo la luz durante la novia oscura haciendo el baile del reconocimiento propio.
Fue en un
ritmo líquido, al encontrarme con el familiar puesto de flores apagadas y la
iluminante atención de esta sola
parada del autobús, y sólo fue ahogarme en la euforia que me provocaba pensar en
ir -a chingar- al vecino de enfrente,
los religiosos, la iglesia, la estupidez, la corriente bendita[sic-de-SIC], la
mentira asquerosa, la tendencia repugnante… la parroquia (crear pausa, aquí... crearla. Crearla como ha creado su dios a su mundo)... de
Nuestra Señora de Lourdes.
(Hombre masa, persona masa: Para saber qué le he preguntado al sacerdote y a los anteriores presentes en -a mencionar- evento, detalle a detalle, durante mi visita al -mencionando- establecimiento en donde se "celebraba[sic]" un acto solemne, al parecer un "funeral"[sic-sin-sic], debes de esperar, y esperar impaciente, a la siguiente entrada. Para más información, favor de recomendar la página y escribirme al correo "caudillo.tello@gmail.com"... TÚ, MASA)
(Hombre masa, persona masa: Para saber qué le he preguntado al sacerdote y a los anteriores presentes en -a mencionar- evento, detalle a detalle, durante mi visita al -mencionando- establecimiento en donde se "celebraba[sic]" un acto solemne, al parecer un "funeral"[sic-sin-sic], debes de esperar, y esperar impaciente, a la siguiente entrada. Para más información, favor de recomendar la página y escribirme al correo "caudillo.tello@gmail.com"... TÚ, MASA)
No hay comentarios:
Publicar un comentario