¿Cuál título?, ¿Qué título?, Jódete!
(Y aun así algunos
estarán siguiendo estas palabras desde “Caudillo de Sueños” en Tumblr, o “Voz
de Madrugada” en Blogger)
Esto es algo que ni a los viejos y nuevos hermanos se
cuenta. Es algo que ni “Nota Suicida” puede desahogar. Las canciones o textos
motivacionales no sirven de nada. Escuchar, cantar, leer o gritar no arreglan,
corrigen, recuperan nada. He perdido inspiración, lucidez, productividad. La
rutina se torna tediosa, me encuentro en un estado hastiado de vivir, esa es la
verdad, la verdad os hará libres. En
mi familia la verdad es síntoma de soberbia. Ya no se puede saber sin que te
digan engreído o que levanten falsos testimonios asegurando a sangre en cuello
y testículos empuñados que te crees un sabelotodo. Nietzsche tenía razón. La
verdad no existe, no porque no demuestre certeza, tampoco por ser una comprobación de alguna
hipótesis sin experimentación. Se trata de respirar, de pensar, de hablar y
conocer, de saber y entender. Todo es mentira.
Pero heme aquí, despierto rompiendo las reglas aparentando
ser un niño más niño todavía, haciendo travesuras y jugando con el tiempo, la
necedad se ha convertido en lo indispensable para la existencia. Siendo la
única persona que se considera un ser humano que ES y que no existe, chocan las
filosofías, lo aprendido se vuelve terrible y lo hermoso me costó la vida,
Silvio tenía más razón que Galileo y la humanidad ignora la verdadera intelectualidad
de su propia especie… Perdón, de algunos pocos de su especie. Sabiendo que
éstos pocos hacían la verdad, pero si la doble mentira en sí es simple. Los
pocos somos mentira. Que sorpresa descubrir que no existimos, somos. Siendo
esto verdad, voy pisando escalones sin subir o bajar a ningún lado porque bajo
y subo al mismo tiempo. Necesito existir para existir como la raza humana, pero
prefiero pensar en lugar de hacer. ¿Está esto mal pensado?
Me quiero quitar la vida, pero el suicidio es una excusa
humana para darse el lujo de convertirse en cobarde. Me dedicaré a explotar al
máximo la capacidad de las personas para reaccionar, que el Tabaco se encargue
del resto. Si alguien está leyendo esto, probablemente me encuentre a su lado o
del otro lado de la pantalla después de mostrarle el camino hacia éstas letras,
seguiré aquí, sin fortuna, aquella fortuna que se encuentra en los cinco
estados de la materia. ¿Inmoral? ¡La moral es solo un invento de ustedes los
supuesto racionales para tener un protocolo verbal de emergencia si alguien no
sigue sus propias reglas! ¿Ética? ¡Mentira! La vida es una mentira, ¿Pero acaso
no son las mentiras nuestra verdadera sustancia intangible que provoca la
felicidad? Dinero, amor, valores, virtudes, pobreza, tristeza, odio, violencia,
paz y muchas otras clases de felicidad. Vaya, ¡Incluyéndome! Te mentiría si te
digo que nunca he reído, pero la doble mentira, es una verdad, la doble verdad
es mentira.
No quiero morir, solo quiero dejar de vivir. Porque vivir
es, más que natural, algo inmensamente humano. Odio la raza humana, admiro
aquellos que tomaron forma semejante y se hicieron pasar por unos más de ellos.
Creo que aquellas personas que vivieron fueron seres, no existencias. Quiero
ser y dejar de existir. Nos veremos del otro lado… Mentira.